¡de vuelta a la cocina!

¡Hola a todos!

Sí, el blog ha estado muy parado porque la autora estaba en stanby, jejeje. Las vacaciones, esa cura para el cuerpo y para el alma, han sido las causantes de esta pausa. La verdad que me muero de ganas por empezar de nuevo a crear en mi cocinita, he leído muchas recetas y me han pasado una de risotto (Vito... no creas que no lo haré, jejeje, en breve además) que creo que os encantará pero por ahora no os doy más pistas, porque como siempre, primero viene mi experimento y luego el resultado.

Por ahora, no me extiendo más. Sólo deciros que he tenido la maravillosa oportunidad de este año conocer dos ciudades increíbles como son Moscú y San Petersburgo. Os recomiendo que vayáis... Merecen realmente la pena. Moscú es más auténtica, más oriental, más cerrada y eso mismo hace que permanezca su atmósfera única. San Petersburgo en cambio, es más europeo, más abierto de mente... y precioso... Pero no se me va a pasar el ámbito culinario. No podéis haceros una idea de lo sabroso que está el solomillo (bife) al strogonoff... ains, ¡qué cosa más buena! Además, el pescado está muy presente en su gastronomía, sobre todo el salmón y otros blancos, como el fletán. No hay vinos que acompañen a la suculenta comida ya que ellos tienen más tradición de cerveza (espesa, eso sí)... Y por último, como anécdota, deciros que uno de los postres típicos de allí son nuestros queridos... ¡petisús! Les encantan, tanto de vainilla como de chocolate, aunque siempre nos quedará un gran tiramisú... ;-)

Queridos comensales... espero que dentro de nada mi blog vuelva a llenarse de recetas... Como siempre, será un placer.

Besos a todos.